jueves, 14 de noviembre de 2024

GÉNESIS PARTE 160

ANDAR POR LA FE - LA CIRCUNCISIÓN Una vida con Dios La Escritura habla de dos clases de risa. Primero, ésa de la cual Dios llena la boca de su pueblo cuando, en el momento de gran prueba, Dios acude en su auxilio de modo muy señalado: “Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, seremos como los que sueñan. Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con éstos” (Salmo 126:1, 2). Luego está la risa que la incredulidad pone en nuestra boca cuando las promesas de Dios son demasiado gloriosas para caber en nuestros corazones estrechos, o cuando los medios exteriores de los cuales Dios se sirve son demasiado pequeños, a nuestro juicio, para la ejecución de sus grandes designios. No nos avergonzamos de la primera de estas risas, ni tememos confesarlo. Los hijos de Sion no se avergüenzan de decir: “Entonces nuestra boca se llenará de risa”. Podemos reír de buen grado cuando Jehová nos haga reír. Pero “Sara negó, diciendo: No me reí; porque tuvo miedo” (v. 15). La incredulidad nos hace cobardes y mentirosos; la fe nos hace valientes y verídicos: ella nos hace aptos para acercamos “confiadamente al trono de la gracia” y “con corazón sincero” (Hebreos 4:16; 10:22). Abraham depositario de los pensamientos de Dios Pero hay más: Dios hace a Abraham depositario de sus pensamientos y propósitos acerca de Sodoma; porque, aun cuando Sodoma no interese personalmente a Abraham, vive bastante cerca de Dios como para que Dios le participe sus designios secretos respecto a esta ciudad. Si queremos conocer las intenciones de Dios en cuanto al presente siglo malo, es preciso que vivamos completamente separados del mismo y que no tomemos parte alguna en sus proyectos y especulaciones. Cuanto más cerca de Dios nos mantengamos, tanto más sumisos a su palabra viviremos, y tanto más también conoceremos sus pensamientos respecto a todas las cosas. Continuará...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario