MANANTIALES DE VIDA, CONOCIENDO A DIOS

CONOCIENDO A DIOS "Así dice el SEÑOR: «Que no se gloríe el sabio de su sabiduría, ni el poderoso de su poder, ni el rico de su riqueza. Si alguien ha de gloriarse, que se gloríe de conocerme y de comprender que yo soy el SEÑOR, que actúo en la tierra con amor, con derecho y justicia, pues es lo que a mí me agrada —afirma el SEÑOR—. (Jeremías 9: 23-24) El conocer a Dios implica el hacer “Juicio y justicia”. Un día ascendió al trono Salún en lugar de su padre Josías, rey de Judá y el Señor envió una advertencia al rey a través de sus profetas para que hiciera el bien como lo había hecho su padre Josías. »¿Acaso eres rey sólo por acaparar mucho cedro? Tu padre no sólo comía y bebía, sino que practicaba el derecho y la justicia, y por eso le fue bien. Defendía la causa del pobre y del necesitado, y por eso le fue bien. ¿Acaso no es esto conocerme? —afirma el SEÑOR—. (Jeremías 22: 15-16) Al parecer este nuevo rey tenía otras intenciones, las cuales, desagradaban a Dios. Una prueba de que alguien conocía a Dios era la de practicar la justicia por igual, especialmente al menesteroso y necesitado, ese era el clamor de Salomón, que todos los reyes o líderes poseyeran la justicia y rectitud, que solo Dios podía otorgar, solo de esa manera se podría asegurar un gobierno que juzgara con rectitud y que hiciera justicia a los pobres, recuerdo también el anhelo de Moisés en conocer a Dios. Dios se muestra ante Moisés como lo que Él es: “Tardo para la ira y grande en misericordia” Salomón recibió la rectitud y la justicia de Dios, por eso su reino fue un reino de paz. Nadie puede jactarse de conocer a Dios si hace todo lo contrario a lo que manda el Señor en su palabra: conocer a Dios no implica el conocerle físicamente, porque sería imposible, Él es Espíritu, conocer a Dios es saber que Él es justo y recto. Los únicos con capacidad para juzgar a los demás son los que practican la justicia, en este caso, eran los sacerdotes. "En cualquier pleito, los sacerdotes fungirán como jueces y juzgarán según mis ordenanzas. En todas mis fiestas observarán mis leyes y mis preceptos, y observarán mis sábados, pues son días santos". (Ezequiel 44: 20-24) El sacerdote Sadoc (Recto) no fue el sacerdote más importante en el reinado de Saúl y David, pero por su lealtad a la casa del rey David, es puesto como sumo sacerdote en el reinado del rey Salomón. Una cualidad de los profetas del antiguo tiempo era que ellos tenían que vivir primero el mensaje de Dios a su pueblo, ya que fuera de Juicio como de bendición, de igual manera, cualquiera que predique el evangelio de Jesucristo, tendrá que vivir primero el mensaje, de lo contrario, no es un predicador enviado. Lo más probable y seguro es que, si buscamos el hacer justicia, esto nos traiga problemas, dificultades, aflicciones; pero el resultado será glorioso, porque habremos conocido a Dios y Él a nosotros. Amén.